Las obras del fotógrafo argentino son exhibidas hasta el 24 de junio en el Museo Provincial de Fotografía Palacio Dionisi, Córdoba, Argentina. Sus imágenes desafían el lenguaje fotográfico.

Alejandro Kuropatwa fue un fotógrafo argentino que plasmó en sus imágenes un estilo vanguardista y rupturista, lo que lo llevó a las salas de los más grandes museos del mundo.

Tras formarse en el Fashion Institute of Technology y en la Parsons School of Design regresó a la Argentina en 1985.

Y formó parte de la escena vanguardista del país de los años ´80: una década marcada por el retorno a la democracia, la efervescencia artística y la libertad creativa.

Retrato de Charly Garcia.

 Hizo tapas de discos, retrató a artistas y fue premiado con el Konex de Platino. Falleció en el año 2003.

Según los críticos, desafió los límites del lenguaje fotográfico y lo consagró como disciplina del arte.

“Cuatro docenas de calas”

La obra de Kuropatwa podrá verse en el el Museo Provincial de Fotografía Palacio Dionisi en Córdoba, Argentina, hasta el 24 de junio.

El recorrido está ordenado cronológicamente y va desde los años ´80 hasta el final de la obra del artista, en el 2003.

La muestra retrospectiva titulada Cuatro docenas de calas abarca a las catorce salas del museo y está ordenado en cuatro núcleos cronológicos. Y cuenta con la curaduría Mercedes Claus.

El recorrido comienza en las salas 1, 2 y 3. Esta primera etapa se remonta a la juventud de Kuropatwa cuando era estudiante de fotografía en Nueva York.

 A través de imágenes transgresoras plasma su acercamiento a la escena del under internacional y local.

En esos años, el artista desafiaba las convenciones culturales de lo que era considerado una “buena fotografía”.

 El uso del gran formato, la alteración de los soportes fotográficos, el minucioso cuidado estético del color, la incorporación de lo azaroso y cotidiano en sus composiciones y la incursión hacia la performance y el videoarte, lo llevaron a ocupar un lugar entre los fotógrafos más relevantes de las décadas de los 80 y 90 de Argentina.

Más íntimo

La exposición continúa en las salas 4, 5 y 6. Esta segunda etapa abarca el momento en que el fotógrafo recibe la noticia de su diagnóstico VIH positivo. Este núcleo refleja una etapa íntima, subjetiva y autobiográfica, plasmada en distintos formatos fotográficos.

Durante esta etapa de su vida, la memoria y el olvido, la fragilidad de la existencia y la vinculación con la muerte, son cuestiones recurrentes en su obra.

La lucha

Luego,  la muestra se abre hacia las salas 7, 8, 9, 10 y 11. Allí, se exhibe la serie fotográfica que marca un punto de inflexión en su obra, y en los cánones socioculturales de la época.

Fue en los 90’, mientras Alejandro se encontraba en California, cuando accedió tempranamente a un tratamiento contra el SIDA.

Al poco tiempo inauguró una exposición en la galería Ruth Benzacar titulada Cóctel, una serie de fotografías que representaban el registro diario de la toma del medicamento.

Del blíster a la cuchara, y de la cuchara a la boca, Kuropatwa registraba el cóctel de antirretrovirales que tomó, bajo un prolífico tratamiento del color, iluminación y composición. En el año 2016, el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) compró esta serie.

Los últimos registros

En las salas 12, 13 y 14 la obra refleja su punto final. Las imágenes exhibidas plasman su reflexión sobre la representación del cuerpo.

Las temáticas que reitera en sus fotografías son los estereotipos de belleza femenina, el placer y la liberación sexual.

De esta manera, el fin del recorrido conjuga seducción y erotismo representados en retratos de magníficas flores llenas de color y de mujeres de distintos estratos sociales fotografiadas con peinados y vestimentas ostentosas.

Para ver

Desde el 5 de abril a las 19 en elMuseo de Fotografía Palacio Dionisi, Av. Hipólito Yrigoyen 622. El día de apertura la entrada es libre y gratuita.

La muestra podrá visitarse hasta el domingo 24 de julio (inclusive), de martes a domingos y feriados, de 10 a 19. Las entradas pueden adquirirse en el lugar o en https://ventas.autoentrada.com/.

Gratis para menores de 16. Mayores de 16 años abonan $250 o $450 entrada combinada. Todos los miércoles es gratuita para todo público.