El queso vegano viene ganando adeptos en el mercado gracias al crecimiento exponencial de sus consumidores. En mayo 2022 se inauguró la primera fábrica en América Latina de quesos realizados de manera sustentable en su totalidad. En este tipo de producción, Argentina lleva la delantera.

Por Amira López Giménez

Foto de portada gentileza de Las Vacas Felices


A Villa Flandria Vegan Foods le costó una inversión de $30 millones erigir la fábrica que producirá más de 40 mil quesos sin lactosa y sin TACC. La alternativa alimenticia es del estilo sustentable y se convirtió en la primera del país -y del continente latinoamericano- en producir quesos hechos en su totalidad con plantas.

Villa Flandria Vegan Foods se dedica a la producción sustentable de quesos en el complejo industrial de Cortínez en Luján, Buenos Aires. Untables, estacionados, camembert, fermentados, brie y quesos en barra, todas estas variedades las elaboran con base a plantas, sin lactosa, sin TACC y Aptos APLV.

Resulta que en el país un promedio del 12% de la población mayor a 18 años es vegetariana o vegana. En tanto, otro 12% se define como “flexitariana”, es decir, se comprometen a reducir de manera significativa el consumo de derivados de animal, pero sin eliminarlo del todo. Y acá está el nicho.

Los últimos años, a partir del 2019 en especial, esta población viene incrementando sus adeptos con un crecimiento del 3% al año. Es decir, la veta comercial para Villa Flandria Vegan Foods se ha duplicado.

A nivel global, las estimaciones de los especialistas marcan que para 2023, tan solo en menos de un año, los alimentos sustitutos de proteínas animales a nivel global como la carne, la leche y el huevo superará los U$S7.000 millones, con una demanda del 57% solo en Europa. En América Latina se proyecta un crecimiento más modesto, en torno al 13% para 2030.

Recetas alternativas

El queso tiene tantos adeptos que el veganismo ha brindado alternativas para acercar la experiencia del lácteo sin violar los derechos animales. Estos quesos tienen muchas bases para fabricarlos. Se pueden hacer con derivados de la soja, leches vegetales, pastas o yogures de frutos secos o semillas.

Fotografía de quesos, cortesía de Las Vacas Felices.

Las opciones son infinitas. Para el portal cuerpo y mente, el queso raw es una especialidad aparte. “En este estilo de quesos veganos no se emplean productos refinados, por lo que son mucho más saludables que muchos de los quesos veganos comerciales, y además no se someten a más de 42 °C, para no desnaturalizar sus ingredientes y preservar todo su valor nutritivo”, sostiene el espacio en la entrada de sus recetas.

De todos modos, este mercado que va creciendo en Europa a paso firme también tiene sus adversarios. Muchos los señalan como sustentables, pero, ultraprocesados. Es decir, no aportan valores nutricionales como los lácteos originales.

Es de público conocimiento que muchas de estas opciones se elaboran a base de agua, aceite de coco procesado y un cóctel químico de almidones, espesantes, colorantes, aromatizantes, entre otros. No incluyen nutrientes que destacan al queso como las vitaminas, proteínas o minerales como el calcio.

Foto de archivo.

En este sentido, la línea Jay & Joy de París, considerada la capital del queso, es la más destacada por producir quesos 100% veganos y nutritivos. Jay & Joy es como una primera respuesta ante la fábrica desenfrenada de alimentos que no lo son.

Para ello, los creadores de esta línea debieron recurrir a la elaboración artesanal de los maestros queseros. Utilizan ingredientes como anarcado, almendras, frutos secos, hierbas, semillas de girasol, leche y aceite de coco. También suelen agregarle algunos ingredientes extras para sabores distintivos como pimiento rojo, cebollas, ajos, orégano, vinagre de sidra.

Estos extras hacen que los quesos artesanales y veganos se distancien más de los ultraprocesados que supieron dominar el mercado cuando el veganismo irrumpió las dietas tradicionales. En América Latina, la opción vegana tiene sello argentino.

Argentina, líder de la quesería vegana

La certificación ecológica y la fidelidad de los ingredientes forman parte de la prueba que determina la calidad de los quesos ofrecidos en las góndolas. Fue el 14 de septiembre del 2021 cuando Abillion, la plataforma de reseñas veganas, presentó sus premios para los cinco mejores quesos veganos del año.

Todos los miembros de la organización vegana votaron en una lista global de 10 quesos. Aparte, hay una lista para América Latina y los primeros cinco puestos lo ocuparon las queseras argentinas Felices Las Vacas y Semilla Natural.

Foto de archivo.

Las versiones de los productos mozzarella, queso cremoso, junto al untable fantástico y questaña ahumado de Felices Las Vacas arrasaron con los primeros puestos a nivel continental. Una excepción fue el queso rawmesan de Semilla Natural.

Asimismo, otros productos como los chocolates y helados veganos tuvieron una amplia aceptación y desempeño en el público. Para Abillion el interés de los consumidores por los quesos veganos aumentó 2.6 veces entre julio del 2020 y junio del 2021.

Los quesos argentinos Las Vacas Felices lideran el ranking latinoamericano en productos veganos con las mejores recetas y opiniones del público. Foto gentileza de Las Vacas Felices.

“En función de nuestros datos de consumo, hemos notado que los consumidores están dispuestos a pagar un poco más por productos vegetales de calidad. Los consumidores se preocupan por la sostenibilidad y respaldan sus valores con sus decisiones de compra”, sostuvo Vikas Garg, fundador y director ejecutivo de Abillion. Sin lugar a dudas, el queso vegano ha hecho grandes saltos en un país donde la carne es parte de la cultura y sus reseñas se asimilan mucho al “queso de verdad“. Las fábricas queseras tienen la oportunidad de hacer llegar productos a un mercado en pleno crecimiento.