Un buscador rastrea documentos de inmigración en Argentina
¿En qué barco llegaron mis antepasados?, suele ser una incógnita para los y las descendientes del proceso de inmigración en Argentina, considerado uno de los países con mayor porcentaje migratorio de Sudamérica. El sitio web del CEMLA ofrece un buscador para encontrar barcos y puertos donde desembarcaron miles de inmigrantes.
Por Amira López Giménez
“Allá no teníamos tierra donde sembrar”. “La guerra se lo había llevado todo”. “La pobreza era demasiada”. Solían ser expresiones comunes que recorrían las charlas familiares que indagaban al pasado. Muchas familias argentinas saben que sus raíces están más allá del mar, del otro lado del charco, como suelen decir. Pero, muchas desconocen quiénes eran, de dónde venían, qué hacían o qué los motivó a hacer semejante viaje a través del globo.
Las nuevas generaciones buscan su historia no solo por una ciudadanía, sino también, como un modo de conocer el pasado, desde dónde vienen y quiénes fueron los responsables de esta existencia. Hoy, el sitio web del Centro de Estudios Migratorios Latinoamericanos (CEMLA) reconoce estas búsquedas y ofrece un registro de más de 70 años para encontrar el barco donde llegaron los familiares y el puerto donde desembarcaron.
Museo de inmigrantes
Fue en 1990 cuando la Ciudad Autónoma de Buenos Aires inauguró un museo en el ex Hotel de Inmigrantes. Y no es para menos, puede decirse que un porcentaje considerable de la población argentina llegó en barcos en tres grandes olas, un fenómeno peculiar cuando Europa agonizaba en pobrezas, hambrunas y guerras.
Al igual que otros países como Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Brasil, Uruguay o Estados Unidos, Argentina se considera un país influido en gran medida por las olas migratorias del siglo XIX.
Fue el gobierno de Julio Argentino Roca que promocionó al país por Europa como un destino dorado. También es conocida la matanza de pueblos originarios para “limpiar” las tierras.
La inmigración fue en su mayoría europea, y en menor medida, del Asia occidental bajo considerables corrientes árabes y judías, hacia los finales del siglo XIX y principios del XX. Italianos en primera medida y españoles, eran recibidos en tierras argentinas. Los hospedaban en hoteles para resguardarlos y luego les regalaban tierras o establecían acuerdos de trabajo.
Incluso, la Constitución de 1853 prohíbe establecer limitaciones para ingresar al país a los «extranjeros que traigan por objeto labrar la tierra, mejorar las industrias, e introducir y enseñar las ciencias y las artes» y ordena al Estado fomentar la inmigración “europea”. Aunque luego predominaron inmigrantes mediterráneos del este europeo y del Asia occidental.
La idea era generar un tejido social, rural y cultural para finalizar la ocupación de los territorios pampeanos, patagónicos y chaqueños. Geografías que en la década de 1880 estaban habitadas por diversas culturas y pueblos originarios.
Una web para encontrar barcos
El Centro de Estudios Migratorios Latinoamericanos (CEMLA) desarrolló en su sitio web un buscador para acceder a la información de los inmigrantes que llegaron en barco entre 1800 y 1960. La idea es proporcionar a los y las descendientes la información del buque en el que llegaron miles de personas durante las grandes oleadas migratorias.
Para acceder se debe contar con el nombre y apellido del antepasado y el buscador proporciona el dato del barco en el que llegó, el puerto donde desembarcó, incluso la profesión u ocupación con la que se registró al salir de Europa.
Para hacer esto posible, el CEMLA elaboró durante años un centro de documentación específico para migraciones nacionales y extranjeras de Argentina. Actualmente, cuenta con más de cuatro mil volúmenes entre libros y publicaciones seriadas.
Según el espacio hay más de 4.400.000 migrantes registrados, 200 países de origen, 3500 barcos y hasta 75 años de registros. Es una biblioteca ambiciosa que resguarda el pasado de cientos de familias.
El mar y las oleadas migratorias
En general, los historiadores distinguen tres momentos cruciales de inmigración en el país. Desde las más tempranas del siglo XVIII hasta 1880, de ahí a la Primera Guerra Mundial, y las más contemporáneas, que arrancan a fines de la guerra.
Desde Polonia, Italia, España, Francia, Ucrania, Alemania, Irlanda, Reino Unido (en particular Gales), Rusia, Medio Oriente como Siria y Líbano, y Sudáfrica, incluso Suiza, llegaban para poblar tierras argentinas.
El primer censo de 1869 arrojaba que la población del país no llegaba a los dos millones de habitantes. Pero, para 1920, un poco más de la mitad de los habitantes de Buenos Aires al menos eran extranjeros. Según el censo de 1960 la población ya alcanzaba los 20 millones.
En 1812, el Primer Triunvirato ofrecía una protección inmediata a cualquier individuo de cualquier nación que quisiera fijar su domicilio en el territorio. Incluso desde 1853 el preámbulo de la Constitución de la Nación Argentina hace referencia a esto bajo el lema “todos los habitantes del mundo que quieran habitar en suelo argentino”. Hoy, Argentina es uno de los países de América del Sur con mayor cantidad de migrantes.
Según un informe de la ONU, el país aún alberga la mayor cantidad de migrantes de toda América Latina y se encuentra en el puesto 28 del ranking mundial. Además, siguen llegando inmigrantes provenientes de China, Colombia, Cuba, Venezuela, Senegal, Ecuador, República Dominicana, Bolivia y Haití. Hoy, la población extranjera representa el 4.7% del total, es decir, unos dos millones de personas habitan tierras argentinas.