Tiene una capacidad “para fabricar” 5 megas de energía y ya le vendió 2,5 megas a Camessa. Está ubicada en Estación General Paz, Córdoba, en un predio de seis hectáreas.

Foto de tapa: la ingeniera Química, Florencia Panela, jefa de la planta y la única mujer trabajando allí.

Por Benita Cuellar

Pura energía. El camino polvoriento y las maquinas movedizas indican el trabajo que se está haciendo en la zona que separa por 20 kilómetros a Jesús María de Estación General Paz, en el departamento Colón, Córdoba, Argentina.

Ahí, entre la ruta nacional 9 y un camino rural se lleva a cabo “un emprendimiento revolucionario” que traerá beneficios para la región, para la provincia de Córdoba y para la Nación.  

Son las 10 de la mañana y en ese lugar, donde los pies se hunden en la tierra, las máquinas y 50 personas pertenecientes a diferentes contratistas trabajan en las obras que completarán la planta Helios, energía limpia.

En funcionamiento

El ruido de los digestores de hormigón (contenedores cerrados de 30 metros por 10 metros de alto), dos en funcionamiento y otros dos aún sin funcionar, y de los artefactos acompañan la enorme tarea, por 24 horas, que desarrollan en un predio de seis hectáreas, para obtener, a partir de residuos orgánicos, biogás y energía limpia para inyectar a la red eléctrica.

Recorrido por Helios, energía limpia Foto: Benita Cuellar.

“En este momento estamos en la puesta en marcha de la planta, producimos gas y lo quemamos en la antorcha”, explica la jefa de Planta, ingeniera Química Florencia Panela.

A su vez, puntualiza: “Estamos quemando el gas en el primer digestor, y el segundo está comenzando a producir gas. Los sustratos se incorporan de a poco a los digestores”.

El digestor se dirige a la laguna y el biogás a la línea de purificación- continúa-. Antes se separa lo sólido, que se convertirá en fertilizante y el líquido que se usará para riego.

Uno de los digestores trabajando para generar energía. Foto: Benita Cuellar.

“Al biogás lo purificamos y lo quemamos con motores cogeneración (cuatro tiempos adaptados a biogas). Recupera el valor de la combustión y ese calor lo usamos para calefaccionar el resto de la planta. Del motor se genera la energía, se eleva la tensión y se inyecta a la red, al sistema interconectado”, resume.

También destaca que la planta trabajará con una cartera muy grande de sustratos y residuos orgánicos, y en “nivelar, en proporción, el carbono y nitrógeno, en función de lo que nos llega. Es un desafío enorme”.     

Los desechos industriales para convertirlos en biogás. Foto: Benita Cuellar.

Idea innovadora

Este proyecto comenzó hace siete años atrás de la mano de la familia Ligato, oriunda de Río Ceballos, Sierras Chicas, pensando en dejar el menor impacto en el medio ambiente, la menor huella de carbono posible (gases de efecto invernadero) transformando esas toneladas de residuos orgánicos en energías renovables.

 “Tiene un grado de revolución importante, no es la primera planta de biogás de la provincia, pero sí es la primera con este concepto de generar energía cien por ciento con residuos orgánicos industriales”, cuenta Mateo Ligato (37), presidente y socio fundador de Helios.

Mateo Ligato, en el centro, presidente y socio fundador de Helios. Foto: Benita Cuellar.

Apenas planificaron la idea, una de las políticas que impusieron fue: no generar energía con picado de maíz. “No creo correcto generar energía con comida”, afirma. Sobre todo, porque su familia se dedica a la rama avícola, con la empresa Pollos San Mateo.

Ligato explica que en la provincia y en el país el tratamiento de residuos está bastante atrasado. Y hay muchas empresas que necesitan una disposición final para sus residuos y que les dé beneficios.

“En nuestro caso entregamos un certificado de disposición final mediante el cual certifica que sus desechos se están usando para generar energía limpia. Y no que va a un basural tradicional”, resalta.

Helios entrega un certificado de disposición final que certifica que los desechos de las empresas se usa para generar energía limpia. Foto: Benita Cuellar.

Te puede interesar: Un paseo hacia un cielo lleno de estrellas

Toneladas de residuos

La planta tiene una capacidad para 30 toneladas de residuos industriales diarios y convertirlos en energía. Foto: Benita Cuellar.

Ya en funcionamiento, no en un cien por ciento, Helios recibe 30 toneladas de residuos industriales por día y los convierte en energía, pero tiene una capacidad para 300 toneladas por día.

Recibe sustratos de “cama de pollos” de Pollos San Mateo, estiércol de la avícola Mitti, vinaza de Refinería del Centro, desechos de frigorífico de cerdo Qualitá y del frigorífico La Superior, entre otras, y está por cerrar nuevos contratos.

El biogás de la planta Helios. Video: Benita Cuellar

 “Al empresariado más responsable le interesa mandar sus desechos acá. Ven que hace falta para que se pongan en funcionamiento la planta y hacer la habilitación comercial”, dice el presidente.  

Energía a nivel nacional

Ligato indica que una vez que tengan la habilitación comercial de la planta comenzarán a inyectar energía.  Y en cuanto a la capacidad, “firmamos un contrato con Cammesa para inyectar 2,4 megas a la red nacional”. Aunque la capacidad de Helios es de 5 megas, “esa diferencia dependerá de futuros contratos que irán apareciendo”, indica.

A su vez, destaca que Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) tiene también proyectos interesantes y la planta tiene para crecer hasta los 5 megas, que es la capacidad de los biodigestores.

 Triple impacto  

Las maquinarias en funcionamiento en el interior de Helios. Foto: Benita Cuellar.

Para Ligato, Helios es un sueño hecho realidad. “Lo miro y no puedo creer cómo creció”, revela.

Adjudicaron con el programa RenovAr II del Ministerio de Energía y Minería de la Nación y con el programa Autoconsumo de Biodiesel B100 de Provincia, “en el cual también ingresamos para cambiar la matriz energética: pasar de combustible fósil a biodiésel en la empresa avícola”, expresa.

Asimismo, resalta que este es el camino a seguir porque “queremos dejar un mundo mejor para nuestros hijos. Que nuestra huella de carbono sea menor que el oxígeno que generamos. Es algo en lo que tenemos que ir trabajando todos y es importante el apoyo de las políticas de Estado”.

“Que nuestra huella de carbono sea menor que el oxígeno que generamos”, dice Mateo Ligato. Foto: Benita Cuellar.

 Y subraya que avanzan con la idea de ser eficientes y dejar una menor huella en la ecología. “En menos de 10 años vamos a lograr esto. La planta de biogás genera un impacto muy grande porque todos nuestros desechos van a venir acá”, asume.

La innovadora planta, que cuenta con 20 trabajadores, es un proyecto considerado de triple impacto, porque trae beneficios ambientales, económicos y sociales para la región.

La planta cuenta con 20 trabajadores. Es un proyecto que trae beneficios ambientales, económicos y sociales para la región. Foto: Benita Cuellar.

El próximo objetivo que se propone es producir maíz y soja para consumo, en un predio pegado a Helios, con el fertilizante de los biodigestores.

 Además, cuentan con una laguna donde van a parar los líquidos que servirán luego para riego de la futura huerta. Y también con un proyecto de cannabis medicinal.

 Educación ambiental  

El espacio en obras para recibir la visita de las escuelas. Foto: Benita Cuellar.

En la planta se trabaja para disponer de un espacio dedicado a la educación ambiental, ya que recibirán las visitas de escuelas para explicarles cómo es el proceso de convertir basura en energía y la importancia de reutilizar los desechos.

Plantas en Argentina

Según la Cámara Argentina de Energías Renovables, en el país hay entre 60 y 80 plantas, sumando mini-biodigestores o mini-lagunas cubiertas de consumo domiciliario. Sólo 20 de ellas corresponden a grandes instalaciones.