¿Porqué y cómo reciclar el aceite?
Un litro de aceite puede contaminar hasta mil litros de agua y reciclar este producto ha sido un desafío. Hoy surgen numerosos puntos de reciclaje, una especie de mapa nacional para hacer del aceite un combustible más amable con el ambiente.
Desde el surgimiento del reciclaje como un modo de paliar la escasez de recursos, y hoy día, más bien como una forma de lidiar con los excesos, el aceite es el elemento de reciclado menos popular de todos . Cuando se habla de reciclaje lo más natural es pensar en vidrio, cartón, y sobre todo, plástico.
Pero el reciclaje de aceite ya puede superar los límites de la cocina, cuando solo era reservado para volver a freír alguna comida para luego desecharlo sin más miras. “En lugar de desecharlo, se puede acondicionar y convertir en biodiesel, un combustible renovable y más limpio que los combustibles fósiles”, sostienen desde la empresa DH-SH para este medio.
Aceites, ¿peor que el plástico?
Desde hace unos años los expertos advierten que un solo litro de aceite puede llegar a contaminar hasta mil litros de agua. Pero antes que los expertos, el dicho popular “son como el agua y el aceite” que define a dos personas muy distintas entre sí, es más aplicable ahora. El aceite genera una película impermeable sobre el agua que evita el intercambio de oxígeno, y un paso más allá, degrada la calidad del agua.
Arrojarlo por el desagüe de la cocina es pésima idea ya que no solo arruina las cañerías, también genera plagas. Otros han optado por tirarlo en la tierra, que de hecho, es peor que el desagüe porque acaba con la fertilidad, aislando sus nutrientes y minerales. Y una vez más, esa película evita el intercambio gaseoso y afecta a los microorganismos presentes en ella.
Según un estudio de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) junto a la empresa DHSH, se verificó que en Argentina se desechan entre 60 y 90 millones de litros de aceite usado por año. A su vez, afirman que apenas un 22% es recuperado, un porcentaje que puede incrementarse hasta un 25%. Mientras tanto, hasta un 53% restante de este producto ni siquiera llega a los puntos de reciclaje.
Un mapa nacional para reciclar aceite
Desde Ambiental Cord, una de las primeras empresas de Córdoba en recolectar este aceite vegetal, indican que su trabajo es enviado a DH-SH, emplazada en Capitán Bermúdez (Santa Fe) y a cargo de este proceso.
Una vez allí, el aceite se trabaja bajo dos instancias consideradas esenciales: decantación y depuración. Así obtienen la materia prima que es enviada a las productoras de biocombustibles de segunda generación. “Todo el aceite usado de cocina y recolectado tiene ese destino. De hecho, hay una certificación internacional que se llama ISCC y que la tiene DHSH”, dicen desde la empresa.
El aceite reciclado se utiliza para fabricar biodiésel, un combustible biodegradable y con menor impacto que los derivados fósiles. Incluso, según los fabricantes, tiene una mayor cualidad lubricante lo que permite alargar la vida útil de los motores.
En diálogo con este medio, la empresa santafesina detalla que el aceite vegetal usado se encuentra clasificado dentro de los residuos especiales o no peligrosos. Cabe aclarar que hoy día no existe una disposición legal en relación a estos aceites desechados. “Cada localidad y provincia tiene su propia ordenanza o regulación, si es que la tiene”, indica DHSH mientras acerca el mapa argentino con los puntos de reciclaje.-